¿Imaginas un laboratorio subterráneo capaz de medir la radiación natural?

¿Te imaginas un laboratorio subterráneo, capaz de medir la radiación natural de la zona y detectar materiales contaminantes, principalmente plomo en agua u otros sitios?
Pues esto se hará con LABChico será el primer laboratorio subterráneo en México, que será construido a cien metros de profundidad dentro de una montaña en la zona turística Río el Milagro, en Mineral del Chico, Hidalgo.
El proyecto comenzó en agosto del año pasado por iniciativa de Juan Carlos D’Olivo y Alexis Aguilar del Instituto de Ciencias Nucleares (ICN), y Eric Vázquez Jáuregui, del Instituto de Física (IF), y se espera que pueda ser inaugurado en un año.
Dicha iniciativa cuenta con financiamiento del programa británico Global Challenges Research Fund (GCRF), que tiene como propósito tratar, por medio de la ciencia, diversos desafíos que enfrenten naciones en desarrollo.
Uno de los principales objetivos es propiciar un acercamiento directo entre la ciencia y la sociedad, pues la gente podrá no sólo conocer el laboratorio y sus especialistas, sino también llevar muestras de agua u otros materiales para ser analizados y descubrir su nivel de radioactividad por medio de detectores de alta tecnología.
Actualmente, los investigadores posdoctorales del IF, Estela Garcés y Adiv González trabajan con D’Olivo, Aguilar y Vázquez, y juntos desarrollan las primeras pruebas en una de las minas de la zona para poder ver cómo funcionan los aparatos, saber sus deficiencias, su resolución y caracterizarlos, o sea, poner fuentes de radiación de baja intensidad, tomar datos, analizarlos y saber así la eficiencia del detector.
Los detectores usan los mismos principios de un contador Geiger, un instrumento utilizado frecuentemente para medir la radioactividad en un sitio específico. En estos contadores, los iones de la radiación son acelerados por un campo electrónico y posteriormente convertidos en un pulso de corriente eléctrica, la cual, señala el paso de radiación.
De hecho, la razón de que sea subterráneo es para reducir el ruido proveniente de los rayos cósmicos sobre la superficie de la Tierra, y hacer mediciones con una mayor certidumbre.
Como parte de su objetivo social, el proyecto también servirá para capacitar a gente de la comunidad local en Hidalgo, desde los guías de turismo que puedan introducir los objetivos y servicios del laboratorio para los visitantes hasta las personas que quieran integrarse al equipo para que ellas puedan operar los detectores.
Fuente: UNAM Global