Lactario en Ciudad Universitaria
En Ciudad Universitaria ya se cuenta con un espacio físico adecuado para ejercer la lactancia, también para protegerla, promoverla y apoyarla. El espacio fue habilitado en el edificio de los Consejos Académicos de Área para beneficio de las mujeres de esta comunidad y sus alrededores.

En Ciudad Universitaria ya se cuenta con un espacio físico adecuado para ejercer la lactancia, también para protegerla, promoverla y apoyarla. El espacio fue habilitado en el edificio de los Consejos Académicos de Área para beneficio de las mujeres de esta comunidad y sus alrededores.
La Universidad Nacional se adhiere por su cuenta a la Semana Mundial de la Lactancia Materna que se celebra todos los años del 1 al 7 de agosto, en una campaña global coordinada por la Alianza Mundial para la Acción de Lactancia Materna (WABA, por sus siglas en inglés) para crear conciencia y estimular la acción sobre temas relacionados con esta práctica.
El mencionado lactario es el primero en su tipo al inaugurarse tras el confinamiento por la pandemia y el noveno en la UNAM; se une a otros ocho espacios, distribuidos no sólo en el campus central, sino también en algunas unidades de la Escuela Nacional de Estudios Superiores (ENES).
En su inauguración, Leonardo Lomelí Vanegas, secretario general de la UNAM, reconoció que se trata de un avance importante y comentó:
Es también un avance en asumir la corresponsabilidad que nos corresponde a hombres y mujeres en el cuidado de nuestros hijos, y es sin duda un reconocimiento de la Universidad, de la necesidad de cambiar no solamente en el discurso, sino en las prácticas, en la distribución de los espacios, nuestra noción de cómo debe concebirse la igualdad de género
Lomelí también comentó al respecto que estos sitios deben ser parte de todos los edificios de la Universidad, tanto de los recintos académicos y administrativos y afirmó: “Esperamos que este ejemplo lo sigan muchas otras dependencias administrativas y entidades académicas de nuestra casa de estudios”.
Beneficios y derechos
Códigos y códices hablan de nodrizas y lactancia, pero no hay metáfora más cercana que la Vía Láctea: “un lugar lleno de estrellas”. El nombre Vía Láctea proviene de la mitología romana, y significa en latín “camino de leche”.
La leche materna es el mejor alimento y la opción más segura para garantizar una buena salud y crecimiento. Es el alimento perfecto para los recién nacidos, debido a su contenido como vitaminas, minerales, proteínas, carbohidratos y grasas de fácil digestión.
Proporciona factores de crecimiento, anticuerpos y otras sustancias que favorecen al recién nacido. La práctica de la lactancia materna también tiene beneficios en la salud de las mujeres, pues ayuda a que el útero regrese más rápido a su tamaño original, lo que auxilia en la prevención de hemorragias posparto; ayuda a perder el peso que se ganó durante el embarazo; es un factor protector ante la osteoporosis, el cáncer de seno y de ovario.
En México, la Ley General de Salud, en su artículo 64, considera acciones en favor de la lactancia; en su fracción II Bis, señala lo siguiente:
Artículo 64.- En la organización y operación de los servicios de salud destinados a la atención materno-infantil, las autoridades sanitarias competentes establecerán:
II. Acciones de orientación y vigilancia institucional, capacitación y fomento para la lactancia materna y amamantamiento, incentivando a que la leche materna sea alimento exclusivo durante seis meses y complementario hasta avanzado el segundo año de vida y, en su caso, la ayuda alimentaria directa tendiente a mejorar el estado nutricional del grupo materno infantil, además de impulsar, la instalación de lactarios en los centros de trabajo de los sectores público y privado.
Todo recién nacido tiene derecho a recibir una alimentación nutritiva que les asegure un desarrollo integral y saludable. A ninguna mujer se le puede impedir el ejercicio de su derecho a amamantar, por ninguna causa. Por ello, el Estado debe promover la eliminación de los obstáculos sociales, laborales y culturales que limitan o desincentivan su práctica, así como generar condiciones que la favorezcan.
Fuente: Gaceta UNAM