La UNAM hecha un mural: Juan O’Gorman

Sí hay un edificio insignia de la Universidad Nacional Autónoma de México, ese sería la Biblioteca Central. Y la razón principal es el mural que lo adorna, obra del pintor Juan O´Gorman.
Originario de la Ciudad de México, O´Gorman nació el 6 de julio de 1905 y fue el hijo mayor del británico-irlandés Cecil Crawford O´Gorman.
Desde muy pequeño tuvo contacto con el arte gracias a su padre y a los paisajes de Guanajuato, sitio en el que vivió durante algunos años de su infancia.
Para algunos autores, sus años en Guanajuato influenciaron el estilo que Juan O´Gorman plasmaría en cada una de sus obras. Tal es el caso del periodista Roberto Vallarino quien, en su texto O´Gorman, desde el azogue del autorretrato múltiple, afirma:
“Él se sentía más pintor de paisajes que de cualquier otra cosa”.
En 1921, O´Gorman ingresó a la carrera de Arquitectura en la Escuela Nacional de Arquitectura de la UNAM. Dicha formación se complementó con el trabajo práctico que realizó en los despachos de Carlos Tarditi, José Villagran y Carlos Obregón.
A los 17 años conoció al célebre muralista Diego Rivera, mientras este se encontraba trabajando en el mural que adorna la Escuela Nacional Preparatoria, con quien formó una estrecha amistad, misma que influenció su estilo artístico.
Entre los años de 1928 y 1931, O´Gorman construyó sus primeras casas-habitación bajo el concepto de funcionalidad (la cual se caracteriza por no utilizar ornamentos). Este sería el estilo que implementó entre 1932 y 1934, en escuelas primarias de la Secretaria de Educación Pública.
Una de sus obras arquitectónicas más reconocidas es la Casa-Estudio de Diego Rivera y Frida Kahlo. Pero, sin duda, su trabajo más reconocido es el mural de la Biblioteca Central.
Este lleva por título “La Representación Histórica de la Cultura”, mide casi 4 mil metros cuadrados y cada cara del edificio narra una etapa histórica de nuestro país.
Esta elaborado con más de 150 tipos de piedras de diferentes clases y colores. De hecho, el 99% del mural está hecho con este material, únicamente para crear el color azul se utilizó vidrio triturado.
O´Gorman trabajó incansablemente hasta 1970, año en el que se retiró de la arquitectura y el muralismo para dedicar su tiempo a la pintura de caballete.
Finalmente, la vida artística de Juan O´Gorman terminaría el 18 de enero de 1982, fecha en la que se quitó la vida.
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