Covid-19: una amenaza viva
aún hay transmisión comunitaria del virus que hundió al mundo en una crisis sanitaria, pues en muchos países se ha visto un incremento o rebrote de casos que no se pueden descartar.

Diversos especialistas universitarios coincidieron en que aún hay transmisión comunitaria del virus que hundió al mundo en una crisis sanitaria, pues en muchos países se ha visto un incremento o rebrote de casos que no se pueden descartar.
Aproximadamente se ha dado un 20 por ciento de incremento en el mundo durante el último periodo de octubre a noviembre. Si esto continuara, de acuerdo con los datos estimados por la Organización Panamericana de la Salud (OPS) se podrían esperar a inicios de 2022 unos 700 mil casos por día en la región. Debido a que se han detectado rebrotes en naciones donde se tienen índices de vacunación más altos que en México, no podríamos estar seguros de que una cuarta ola no pueda ocurrir.
Sin embargo, debe reconocerse que el programa de vacunación en México ha tenido gran avance, para el 27 de diciembre de 2020 se había vacunado, con por lo menos una dosis, a 0.01 por ciento de la población y para este momento; para finales de noviembre 2021, la cifra es de 58.5 por ciento.
Se estima que un 49.6 por ciento del total de la población tiene un esquema completo. El pasado 29 de octubre, el Gobierno de la Ciudad de México informó que 83 por ciento de la población mayor de 18 años tenía al menos una dosis. Así, se esperaría que la cuarta ola fuera menos agresiva.
Pero en diversos estudios epidemiológicos se ha enfatizado que las vacunas no son una medida preventiva que por sí sola logre evitar las infecciones.
Los Factores de riesgo para personas vacunadas y no vacunadas siguen siendo las enfermedades crónicas degenerativas, la diabetes mellitus, obesidad, hipertensión; enfermedades cardiacas, renales, alguna condición de inmunocompromiso, hacen más vulnerables y las que tienen mayor probabilidad de presentar enfermedad grave e incluso, de ser hospitalizado.
De igual forma otro grupo de mayor riesgo son las personas de la tercera edad, puesto que, a pesar de estar vacunadas, tienen 11 veces más probabilidades de riesgo de muerte por la Covid-19.
Medidas de prevención
Las medidas preventivas no deben dejarse de lado. Las personas tienen que evitar acudir a actos masivos realizados en lugares cerrados y sin el uso de cubrebocas y medidas preventivas. No sólo es el cuidado individual, es el cuidado de todos aquellos que nos rodean, familiares, amigos, compañeros, entre otros.
El lavado de manos es imprescindible para no bajar la guardia: antes de comer o de preparar los alimentos, antes de tocarse la cara, después de ir al baño, después de visitar un lugar público, después de estornudar, toser o sonarse la nariz, después de tocar la mascarilla facial y antes de ponérsela, después de cambiar pañales, después de entrar en contacto con alguien enfermo, después de tocar a los animales o mascotas.
Utilizar mascarilla facial o cubrebocas siempre que entre en contacto con otras personas y en entornos cerrados. La mascarilla debe cubrir nariz y boca y embonar adecuadamente a su rostro. Manténgala limpia y cámbiela cuando se humedezca o ensucie.
Mantener las áreas ventiladas, aunque es época de frío, y no acumular muchas personas en un mismo cuarto. Y, de nuevo, usar todo el tiempo el cubrebocas..
Lo mejor es que todavía trabaje desde casa si es posible, que se eviten tumultos, los lugares cerrados con mucha gente, usar cubrebocas siempre, especialmente en espacios cerrados, y todas las demás medidas, no sólo para los que no están vacunados, sino toda la población.
Fuente: Gaceta UNAM