Jardines botánicos contra el cambio climático

Más allá de ser espacios creados para conservar los recursos vegetales, los jardines botánicos son una estrategia para mitigar el cambio climático al tener en los árboles grandes sumideros de carbono que los hacen los pulmones del planeta, capaces de almacenar 23 kg de CO2 al día y hasta una tonelada de dióxido de carbono en toda su vida, aseguraron Jorge Cortés Flores y Carmen Cecilia Hernández Zacarías, del Jardín Botánico del Instituto de Biología (IB).
En estos momentos, en los que el cambio climático es una realidad y nos encontramos enfrentando sus consecuencias, la cantidad de plantas y árboles que albergan los jardines botánicos son de gran ayuda para mitigar sus efectos, explicaron.
Entre la vegetación que existe hay especies más vulnerables que otras, que además, dependen mucho de las zonas en las que se encuentren. En zonas templadas, por ejemplo, los pastizales están por desaparecer; la vegetación en las zonas altas del país, por su parte, también están por extinguirse; en las zonas áridas muchas especies vegetales están al borde de su desaparición por el incremento en la temperatura y la disminución en las precipitaciones.
Cortés Flores explicó que la transpiración de las plantas es capaz de modificar microclimas, por lo que se debería promover cada vez más la existencia de estos espacios verdes que permitan el intercambio entre oxígeno y dióxido de carbono de arbustos y plantas, preferentemente nativas para mantener también a las comunidades de visitantes florales, polinizadores y herbívoros que dependen de ellas.
Por su parte, Carmen Cecilia Hernández, coordinadora del área de Difusión y Educación del Jardín Botánico del IB, mencionó que los jardines también cumplen una función de investigación y educativa, gracias a que muchas de las especies que albergan tienen una importancia cultural e histórica, como es el caso del chile, amaranto y otras plantes que México ha dado al mundo.
En este contexto educativo, los jardines botánicos se convierten en puertas de acceso para que la población conozca la naturaleza, y de esta misma forma se interese y la proteja, ya que actualmente nos encontramos ante un mal llamado ceguera vegetal, por el cual no somos capaces de conocer nuestro entorno, y por consecuencia, no sabemos cómo cuidarlo.
“Que la gente sepa que está rodeada de plantas que son seres vivos y que tanto ellos como los humanos tenemos un papel importante, de ahí que los educadores de los jardines botánicos somos personas a quienes nos preocupa mucho esta situación y tratamos de llevar el mensaje a través de diferentes actividades, materiales y visitas guiadas”, comentó la experta para reafirmar la importancia de erradicar esta ceguera.
FUENTE: GACETA UNAM
muy interesante .esto tambien debe ser parte de os programas educativos ,enseñar a cuidar nuestra casa que es la tierra .no importa que no se viva en las areas rurales .parte de la formacion de jovenes y niños . y que los adultos retomen estos abitos tan saludables .
Comparto la opinión de los especialistas acerca de la importancia que tienen esos espacios verdes en cualquier lugar donde se ubiquen y también considero de suma importancia su difusión a través de diferentes medios para que un mayor número de personas conozca la situación y aprenda a resguardarlos e incluso a reproducirlos en sus propias viviendas de acuerdo a la disponibilidad del espacio. que se tenga Felicidades por esa importante labor de los encargados del Jardín Botánico del IB
Pienso que si es tan urgente, seria muy importante establecer programas educativos para toda la sociedad, en donde esto se convierta en una forma de empleo y así generar una mayor conciencia. Desgraciadamente nadie hace nada de a gratis en este planeta.