Para conmemorar el Día Meteorológico Mundial, el ICAyCC llevó a cabo una jornada de divulgación

El Instituto de Ciencias de la Atmosfera y Cambio Climático (ICAyCC), conmemoraron el Día Meteorológico Mundial (23 de marzo) con una jornada de divulgación de su campo interdisciplinario, abordando procesos atmosféricos, terrestres y planetarios con visitas guiadas a sus instalaciones.
El trabajo, procesos, insumos e instrumentación de la comunidad de este Instituto; compuesto entre otros por 49 investigadores y 34 técnicos académicos, fueron expuestos en un tránsito de cinco horas intensas a través de visitas a laboratorios, su plataforma instrumental, así como en conferencias y demostraciones.
En el arranque se realizó la presentación oral de desarrollos y resultados del Programa de Estaciones Meteorológicas del Bachillerato Universitario (PEMBU), el cual es uno de los proyectos institucionales de esta Universidad, que vincula las funciones sustantivas de docencia e investigación, en las que participan conjuntamente los Subsistemas del Bachillerato (Escuela Nacional Preparatoria y Colegio de Ciencias y Humanidades) y de la Investigación Científica.
Una de las exposiciones fueron en el jardín que mira hacia la entrada lateral del Auditorio Dr. Julián Adem; en dónde se colocaron algunas mamparas con infografías de los proyectos desarrollados por los alumnos de bachillerato que se referían, entre otros temas, a los rayos ultravioleta, la lluvia nociva, el golpe de calor, la calidad del aire y el calentamiento global.
Agrupados de manera alternada en cuatro o seis personas, las visitas guiadas llegaron hasta lo más alto del inmueble, donde se ubica la Plataforma de Instrumentación Meteorológica y Ambiental, que forma parte de la Red Universitaria de Observatorios Atmosféricos.
Se hallan ahí el sofisticado Perfilador de Vientos, que se asemeja en facha a una lavadora, el cual funciona a través de pulsos de láser que irrumpen contra partículas atmosféricas; y el disdrómetro, que caracteriza el “jugo” de nubes que en la mayoría de las ocasiones viene adicionado con mercurio, vanadio y cromo.
En el Laboratorio de Cromatografía de Gases, en el piso 2, el químico José Manuel Hernández Solís expuso que ahí se abocan a hurgar en los compuestos volátiles de gases, y advirtió que el tolueno y el benceno son sustancias que respiramos en Ciudad de México.
Agregó que se han realizado investigaciones incluso sobre el aliento humano para establecer su nivel de hidrocarburos bioquímicos, con lo que se puede determinar si una persona tiene alguna enfermedad, como la diabetes, esto debido a un compuesto conocido como acetaldehído.
Los invitados se hallaron también en el Laboratorio de Fluidos Geofísicos, donde se realizó una representación análoga de cómo interactúa el viento en las montañas.
En el cierre conocieron el cuarto frío (Supercómputo Ometeotl), donde se ubica un centenar de servidores con capacidad para 2,500 cores (procesadores multinúcleo); es decir, cómputo de alto rendimiento para realizar la modelación numérica de la atmósfera.
Fuente: Gaceta UNAM