Home office: una opción antes y después del coronavirus
La pandemia por la COVID-19 llevó a que más empresas e instituciones lo implementenpara continuar sus actividades durante la emergencia sanitaria. Así lo comenta Erika Villavicencio-Ayub,

El home office, también conocido en México como teletrabajo, es una modalidad laboral en la que los trabajadores pueden realizar sus actividades profesionales vía remota, sin tener que presentarse físicamente en las instalaciones de la empresa.
Aunque esta forma laboral lleva años en funcionamiento, gracias a la expansión del uso del internet, al desarrollo de diferentes herramientas digitales y la posibilidad de que algunas profesiones puedan realizarse desde el hogar, la pandemia por la COVID-19 llevó a que más empresas e instituciones lo implementenpara continuar sus actividades durante la emergencia sanitaria. Así lo comenta la doctora Erika Villavicencio-Ayub, coordinadora de Psicología Organizacional de la Facultad de Psicología de la UNAM.
Y pese a que este cambio pudo afectar a distintas personas no acostumbradas o asociadas al nuevo entorno de trabajo, el proceso de adaptación es mejor si se aplican diferentes estrategias que van desde diseñar y adaptar un espacio óptimo para facilitar la concentración, hasta mantener una rutina donde se favorezca la repetición.
De igua forma, la capacitación, transición y apropiación tecnológica ayuda a los trabajadores para el uso de herramientas digitales, mismo que mantener una comunicación clara y transparente con los líderes de área, con el fin de que todos sigan sus funciones desde casa.
Sobre transición hacia la nueva normalidad, ésta puede poner a prueba nuestras capacidades de adaptación y de resiliencia, comenta la especialista. Sin embargo, muchas empresas han visto positivamente la implementación del home office, pues además de reducir costos operativos como renta, mejoraron su productividad y la satisfacción laboral de los trabajadores además de mantener un ingreso económico en una situación donde a nivel mundial aumentó el desempleo, también tuvieron la oportunidad dereorganizarse, convivir con su familia y sentirse menos expuestos a la delincuencia.
Fuente. Ciencia UNAM
Acorde con todo lo expuesto, yo sumaria que, por mi experiencia en homeoffice desde los 90’s hoy en México se ha tenido que confiar en el trabajador, porque antes se pensaba que había que controlarlo y ponerle hasta reloj checador. La esclavitud y control laboral tuvo que romperse y ver que desde la voluntad y convicción del trabajador por hacer bien las cosas y demostrar sus capacidades es posible ser productivo y dar los mejores resultados, es decir, ser muy profesional y tener la vocación por el trabajo y hacer las cosas bien a la primera vez y siendo libres de tu propia administración del tiempo.