Algún día, nuestro sol morirá: UNAM

Jorge Cantó, investigador emérito del Instituto de Astronomía (IA) de la UNAM, afirmó que todos los astros tienen un ciclo de vida, como los humanos: nacen, crecen y mueren.
En el caso del Sol, aseguró, llegará a una etapa en la que se inflará, cambiará su color a rojizo, se hinchará hasta la órbita de Marte, después se contraerá y se apagará hasta morir.
Durante su existencia, dijo, las estrellas producen energía a través de reacciones nucleares en su centro, y también expulsan material.
Explicó que en el Universo vagaba una nebulosa (gas y polvo), y debido a la fuerza de gravedad se contrajo hasta formar el Sol, una estrella que hoy cuenta con cuatro mil 500 millones de años.
Se trata, refirió, de una estrella común y corriente: no es de las más grandes ni de las más pequeñas, tampoco es una recién nacida, ni muy evolucionada. Sin embargo, es la principal fuente de vida en la Tierra.
Su masa es de 1.989 x 1030 kilogramos. Regularmente los científicos utilizan esta medida como referencia para calcular la de otras estrellas. Por ejemplo, pueden afirmar que una estrella tiene 20 o 30 veces la masa del Sol.
De acuerdo con Cantó, todas las estrellas nacen de la misma forma: a través de la contracción de nubes interestelares; regularmente queda material de estos gases, que gira a su alrededor en forma de disco, y es de donde surgen los planetas. Aseveró que así ocurrió en nuestro Sistema Solar.
“Actualmente, los astrónomos han planteado que todas las estrellas podrían tener estos gases girando a su alrededor; sin embargo, la teoría no se ha confirmado”.
Finalmente, dijo que todo el material que sale del interior de una estrella se mezcla con aquello que se encuentre vagando por el espacio sideral, y de ahí se forman nuevas estrellas y planetas.
Fuente: DGCS, UNAM